El presidente Alberto Fernández lanzó el primer cogollo al aire, justo a tiempo, ya que este domingo Argentina elige congresistas que discutirán el uso recreativo de cannabis.
Así lo destaca la agencia Sputnik en un artículo en que arriesga: el cannabis recreativo en Argentina es el debate ineludible para el Congreso que se forma.
Es que el 12 de septiembre tendrán lugar las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias legislativas (PASO), que definirá los candidatos que competirán en noviembre.
Ocho distritos elegirán senadores: Catamarca (noroeste), Chubut (sur), Córdoba (centro), Corrientes (noreste), La Pampa (centro), Mendoza (oeste), Tucumán (noroeste) y Santa Fe (este).
Por otro lado, se elegirán 127 diputados nacionales en todas las provincias y en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, del total de 257 bancas. Sí, en un solo día, Argentina elige congresistas.
Pero el futuro parlamento para el cual Argentina elige congresistas no es uno más. Y buena responsabilidad de eso es de Alberto Fernández.
A mediados de agosto, el presidente argentino brindó una distendida entrevista al medio Filo News en la que se manifestó a favor de “abrir el debate” para legalizar el consumo de marihuana recreativa.
“La primera tentación mía es terminar con la hipocresía. La marihuana hace daño, el tabaco mata de cáncer y el alcohol degrada al ser humano”.
“Si estos dos son legales, explíquenme por qué hay ilegalidad en el otro lado”, opinó Fernández.
Durante la administración Fernández, ya se legalizó el cultivo de hasta nueve plantas de marihuana para uso medicinal, para quienes se registren.
También se envió al Congreso un proyecto de ley para fomentar la producción industrial del cannabis, sus semillas y derivados.
En consecuencia, la campaña electoral de cara a las PASO tuvo por primera vez al cannabis de uso lúdico entre sus temas principales.
Argentina elige congresistas, ¿eligen ellos y ellas al cannabis?
Muchos se preguntan cuál es la suerte de la marihuana este domingo en el que Argentina elige congresistas.
El panorama no es tan malo: sólo dos candidatos están en contra.
Una es la exgobernadora de la Provincia de Buenos Aires (este), María Eugenia Vidal, quien en esta ocasión se presenta por la ciudad del mismo nombre.
Vidal opinó que Argentina “no está lista” para la regulación del cannabis recreativo, también en una entrevista a Filo News.
El otro es el veterano de la guerra de Malvinas, representante de la extrema derecha, Juan José Gómez Centurión.
“La legalización aumenta el consumo, no ayuda al drogadicto y no evita el tráfico de estupefacientes”, dijo el precandidato a diputado.
Entre los principales candidatos para las elecciones en las que Argentina elige congresistas hay seis que están a favor de legalizar el cannabis.
Dos de ellos son los oficialistas Leonardo Santoro y Victoria Tolosa Paz, quienes compiten por la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires, respectivamente.
“Hay que animarnos a legislar el tema en Argentina”, se animó a declarar Tolosa Paz.
El otro apoyo al cannabis está en la izquierda. Allí, los y las precandidatas Nicolás del Caño, Manuela Castiñeira y Miriam Bregman se pronunciaron al respecto.
“Soy defensora del consumo. Todos hemos fumado un porrito”, dijo a El Planteo Castiñeira.
Javier Milei, Ricardo López Murphy, Florencio Randazzo y José Luis Espert se mostraron indecisos, como si eso fuese posible en 2021 y con toda la región legalizando.
Argentina elige congresistas para impulsar un gran negocio
El Gobierno argentino cree que con la nueva actividad puede crear unos 10.000 puestos de trabajo y ganar cerca de 50 millones de dólares anuales.
Esa es su principal motivación con respecto a la planta.
El uso lúdico es el único abordaje que todavía no se ha debatido en el pleno del parlamento, que este domingo inicia su camino electoral para renovar escaños.
Todo de cara a los comicios generales de noviembre, en los que Argentina elige congresistas.
“Después de lo que fueron otras conquistas como el matrimonio igualitario, la ley de identidad de género y unas más de corte migratorio, creo que en materia de derechos humanos este Gobierno ya avanzó con el tema de aborto”, dice a Sputnik el presidente de la ONG Reset, Mariano Fusero.
“El cannabis hoy lleva la delantera para ser un tema a tratar por la nueva composición del Congreso”, asume el representante de la organización especializada en política de drogas y derechos humanos).
Fumones en Argentina existen, y muchos.
Una reciente encuesta realizada entre 64.000 personas de 16 a 92 años que viven en los 24 distritos nacionales develó que el 84,2 por ciento del total usa cannabis en forma recreativa.
Sin embargo, la Ley de Drogas vigente desde 1989 castiga con penas de entre un mes y dos años de prisión por tenencia para consumo personal.
Y hasta 15 años si existieran pruebas de comercio.
Fusero advierte que antes de todo eso es necesario lograr “una despenalización del consumo, más allá de una regulación del cannabis”.
Asimismo, señala que sobre eso existe “cierta confusión en el discurso político”.
“Cuando hablamos de despenalización hablamos de figuras asociadas al consumo, y cuando hablamos de consumo, como reconocimiento a las libertades individuales, estamos hablando de cualquier tipo de sustancia”, advierte el abogado.
Argentina elige congresistas y por fin discute sobre el goce
Recién en noviembre Argentina elige congresistas pero ya puede decir que en ya ganó un debate muy importante: el de las libertades individuales.
La campaña nacional que el año pasado logró la ley de aborto, seguro y gratuito en Argentina también logró meter en la agenda la discusión por el derecho al goce.
Un derecho humano hasta ahora censurado en una sociedad de fuerte raigambre religiosa. Un aspecto a considerar ahora que Argentina elige congresistas.
El presidente y también abogado Alberto Fernández entiende que el marco legal actual genera un profundo desequilibrio entre la legalidad del alcohol y la ilegalidad de la marihuana.
Para Fusero, “las históricas campañas en contra al cannabis estuvieron atravesadas por una fuerte presión antihedonista”.
“Muchas de estas sustancias tienen la capacidad de producir placer, y el placer también es un derecho humano, y es el derecho a la salud y bienestar de las personas. No es algo que tenemos que banalizar”.
También cree que en una regulación es importante un estado presente, un modelo similar al de Uruguay, Canadá y algunos estados de Estados Unidos, no todos.
“Para no dejar el tema en manos de la mercadotecnia y corporaciones a nivel internacional que ya existen y tratan de monopolizar el comercio a gran escala del cannabis”, argumenta.
“Si sostenemos esa lógica empresarial y comercial vamos a tener resultados disvaliosos en materia de salud pública sobre todo en índices de consumo y fomentar el uso mediante estrategias basadas en la propaganda”, agrega.
En palabras más simples, “no tenemos que repetir con el cannabis la misma historia que padecimos con el alcohol y el tabaco”.
Postulados a tener en cuenta ahora que Argentina elige congresistas.
Fuente: La Marihuana