Los agentes hallaron hasta seis perros de raza peligrosa para impedir el acceso a los cultivos en malas condiciones higiénicas

   VALÈNCIA, 12 Mar. (EUROPA PRESS) –

   Agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil han desmantelado tres puntos activos de venta de droga en las localidades de Chiva y Buñol (Valencia) en el marco de una operación conjunta en la que han detenido a dos personas de 36 y 65 años e investigan a otras dos. Los agentes han intervenido un total de 250 plantas de marihuana así como diverso material utilizado para el cultivo de las drogas, una báscula de precisión y dinero en metálico.

   A los detenidos se les atribuye, en diferente grado de participación, los delitos de organización criminal, contra la salud pública por cultivo y elaboración de drogas, defraudación de fluido eléctrico, así como un delito de lesiones supuestamente cometido por uno de ellos cuando conducía uno de los vehículos que utilizaba y con el que causó lesiones a dos personas y huyó, un día antes de los registros.

   Las investigaciones comenzaron a finales del pasado año por parte de la Policía Nacional y la Guardia Civil de Chiva y Buñol cuando los agentes encargados localizaron un chalé en la primera de estas localidades que se estaría utilizando como laboratorio clandestino de marihuana.

   De las investigaciones llevadas a cabo, se averiguó que la organización criminal se asentaba en ambos términos municipales y pudieron constatar que un varón acudía a las casas en distintos días y horarios para controlar las plantas y a los cuidadores que residían allí, y que adoptaban «muchas precauciones para no ser detectados en sus desplazamientos».

   Fruto de las investigaciones realizadas y de la coordinación operativa de los dos cuerpos policiales se formó un equipo conjunto de trabajo de vigilancias, seguimientos y un complejo análisis en torno a los sospechosos. Una vez identificados y localizados, los agentes detuvieron a dos integrantes de la banda en Chiva y Buñol e investigan a otros dos en las mismas localidades.

   En todos los registros de los chalés se localizó un sofisticado sistema para la producción de marihuana compuesto por generadores de electricidad, climatizadores camuflados en el interior de los sótanos, extractores de aire, filtros, lámparas de alta potencia, ventiladores, transformadores, productos específicos para el cultivo, una gran cantidad de herramientas y otro material para que los cultivos de marihuana mantuvieran unas condiciones específicas de humedad y temperatura óptimas.

   Los cultivos tenían un elevado poder de producción, divididos en varias estancias, que supuestamente estaban especialmente diseñadas para albergar la instalación necesaria para hacer crecer el máximo número de plantas de marihuana posible.

   Los agentes tienen sospechas de que podrían estar planificando ampliar su actividad ilegal ya que habían construido y se encontraban habilitando como laboratorio clandestino de marihuana varias habitaciones de una de las viviendas registradas.

   Los chalés registrados contaban con un sofisticado circuito ilegal eléctrico con el que obtenían la corriente eléctrica de forma ilícita y realizaban los enganches mediante manipulaciones de anulación de los contadores.

PERROS DE RAZA PELIGROSA

   Además de las plantaciones propiamente dichas, los agentes hallaron hasta seis perros de raza peligrosa de diversas edades que eran utilizados como medios disuasorios para proteger los cultivos. Los animales estaban en unas «pésimas condiciones higiénico-sanitarias», lo que obligó, además, a la intervención de agentes especialistas en protección de la naturaleza para preservar el bienestar animal de los canes, que tuvieron que ser trasladados a un centro de protección especializado.

   Como consecuencia de las pesquisas llevadas a cabo por los agentes investigadores, pudieron averiguar que uno de los detenidos, el día de antes a los registros, cuando circulaba con su vehículo en Meliana supuestamente causó lesiones a dos personas y se dio a la fuga, hechos por lo que también está siendo investigado.

   La operación ha sido desarrollada por la Policía Nacional y la Guardia Civil de Chiva y agentes de la Compañía de la Guardia Civil de Lliria y Requena con el apoyo del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona), distintas Unidades Territoriales de la Comandancia de Valencia, USECIA de la Compañía de Llíria y Servicio cinológico de la Comandancia de Valencia.

   Los detenidos e investigados y efectos intervenidos han pasado a disposición del Juzgado número de Requena (Valencia), que ha ejercido la dirección judicial de la investigación.

Fuente: Europa Press