BURGOS, 24 Jun. (EUROPA PRESS) –

La Guardia Civil ha desmantelado en el alfoz de Burgos un laboratorio ‘indoor’ con 120 plantas de marihuana y ha detenido a dos personas en el marco de la operación ‘Noctis’, según han informado a Europa Press fuentes de la investigación.

Los detenidos son L.S.O, de 40 años, y R.C.O, de 44, como presuntos autores de los delitos contra la salud pública por cultivo y tráfico de drogas y por defraudación de fluido eléctrico.

La investigación se remonta semanas atrás, cuando la Benemérita obtuvo información relevante que hizo sospechar de la existencia de una vivienda ubicada en una localidad del alfoz burgalés, en cuyo interior se podía llevar a cabo labores ilegales de cultivo de marihuana.

Los investigadores llevaron a cabo vigilancias discretas sobre una casa rústica al considerar que su interior pudiera esta habilitado para albergar una plantación de cannabis. A la vez se consiguió identificar a dos personas vinculadas con la citada casa, que si bien no residen en su interior, sí realizaban visitas esporádicas a la misma.

Avanzadas las investigaciones se llevó a cabo un registro domiciliario que desveló una «moderna y profesional» instalación con lámparas especiales de gran potencia, material aislante, decenas de metros de cableado eléctrico, termostatos, filtros, extractores y bombas de agua.

RIEGO HIDROPÓNICO

El interior de la casa estaba acondicionado para mantener varias cosechas anuales, destacando el sistema de riego, de cultivo cien por cien hidropónico, caracterizado por el empleo exclusivo de agua y nutrientes para el desarrollo y floración de la planta, desestimando el empleo de sustrato.

Junto con las 120 plantas existentes de mediano porte se han aprehendido 2.300 gramos de cogollos ya secos de esta sustancia, por lo que estas dos personas han sido detenidas como presuntos autores de un delito de cultivo y tráfico de drogas.

Mientras personal del cuerpo realizaba la inspección ocular del lugar, técnicos de la empresa suministradora de electricidad desplazados a la vivienda confirmaban la presencia de un «puenteado» ilegal, detectado en la instalación eléctrica.

Con ello pretendían camuflar el elevado consumo eléctrico que conlleva este tipo de instalaciones, para mantener activos todos los aparatos eléctricos y sacar adelante las cosechas, evitando el alto coste que lleva aparejado y levantar sospechas.

No obstante han incurrido en una defraudación de fluido eléctrico, delito que adicionalmente les ha sido imputado a los detenidos. La investigación ha sido dirigida por el Juzgado de Instrucción Número 3 de Burgos y coordinada por la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Guardia Civil de Burgos.

Fuente: Europa Press