Publicado 30/11/2018 12:27:02CET

LOJA (GRANADA), 30 Nov. (EUROPA PRESS) –

La Guardia Civil ha investigado a dos individuos de 57 y 56 años y se ha incautado de 366 plantas de marihuana y una pistola detonadora con munición, en el marco de la operación Fungus contra la droga llevada a cabo en Loja, en el Poniente de Granada.

Según ha informado la Guardia Civil en una nota de prensa, los dos investigados por supuestos delitos contra la salud pública y por defraudación de fluido eléctrico son vecinos de Loja y cuentan con antecedentes policiales.

En esta operación, el Instituto Armado ha localizado dos plantaciones de cannabis sativa donde se han intervenido 175 plantas en la primera y 191 en la segunda. También se han intervenido 1,6 kilos de marihuana, junto con la pistola detonadora y la munición.

Esta operación comenzó cuando los agentes del Área de Investigación de la Guardia Civil de Loja averiguaron que uno de los ahora investigados podía dedicarse en esa localidad al cultivo intensivo de cannabis y a la elaboración de marihuana. Con las pruebas obtenidas durante la fase de investigación, solicitaron autorización judicial para registrar la vivienda del sospechoso.

Durante el registro, a primera vista, no parecía que hubiera cultivo alguno, aunque, dentro, «el característico olor del cannabis era muy fuerte». En una de las habitaciones, al retirar una cama plegable que había apoyada en la pared, los agentes encontraron una abertura que daba paso a una habitáculo oculto donde crecían 175 plantas de cannabis sativa y había una pistola detonadora y munición escondidos.

Se ha enviado este arma al Servicio de Criminalística para que la analice e informe si «ha sido manipulada y dispara fuego real; y por si estuviera implicada en otros hechos delictivos».

En el curso de la investigación, la Guardia Civil averiguó que un vecino del primer investigado también cultivaba cannabis. Los agentes registraron su domicilio y localizaron una plantación con 195 plantas y además 1,6 kilos de marihuana ya dispuestos para la venta.

Los técnicos de la compañía Endesa han certificado que la electricidad que permitía el cultivo ‘indoor’ del cannabis procedía de sendos enganches ilegales a la red eléctrica.

Fuente: Europa Press