El aceite de cannabis sirve para los dolores y su uso se ha extendido en personas de todas las edades y con casi cualquier padecimiento. Aprende a continuación cómo hacerlo y cómo debes tomarlo para obtener resultados.

Cuando se tiene ciertos padecimientos, sin importar su naturaleza, uno de los síntomas más comunes y que más causa molestia es el dolor, sin importar si es leve, crónico o agudo. Existen muchas medicinas para poder mitigar el dolor intenso, sea cual sea su origen, pero cada día hay una demanda mayor de analgésicos más naturales.

Casi todas las plantas que pertenecen a la familia del cannabis presentan propiedades analgésicas y antiinflamatorias, lo que las ha convertido en una alternativa para tratar el dolor cuando se usa en su presentación de aceite. Por eso, hoy te contamos cómo es que el aceite de cannabis sirve para los dolores, cómo puedes hacerlo en casa y qué tanto debes tomar según tu caso.

¿Por qué el aceite de cannabis sirve para los dolores?

Lo primero que hay que recordar es que el aceite de cannabis no solo se emplea para mitigar el dolor agudo de algunos padecimientos, sino que tiene muchos otros usos en pro de la salud. Puede ser desde un anticonvulsionante hasta un ansiolítico o ayudar a controlar la diabetes. Sin embargo, sus efectos dependen de la variedad de cannabis que se usa. Esto es porque cada variedad tiene diferentes proporciones de THC y CBD, sus sustancias activas.

Un compuesto de aceite de cannabis que contenga más THC logrará que haya efectos psicoactivos y te dejará con esa sensación de “colocado”. Por otra parte, si la variedad que escoges para hacer el aceite de cannabis tiene más CBD, entonces sí podrás gozar de los beneficios medicinales que la marihuana y su familia puede ofrecer. Estas proporciones dependen siempre de la cantidad y tipo de cannabinoides que contenga la planta de cannabis.

Estudios realizados en el Reino Unido

Una de las investigaciones que más respalda el uso del aceite de cannabis fue el que se realizó en el Reino Unido y que se denominó “Datos de resultados clínicos de la primera cohorte de pacientes con dolor crónico tratados con aceites sublinguales a base de cannabis en el Reino Unido: análisis del registro de cannabis medicinal del Reino Unido”.

En este estudio publicado, se encontró que los medicamentos que tenían base en cannabis (sobre todos los que contenían el cannabinoide CBMP) funcionaban en la mayoría de los pacientes como una opción terapéutica en caso de dolor crónico primario, pues se emplean sus propiedades sobre el sistema endocannabinoide para modular los procesos de dolor central y periférico.

Sin embargo, aún hay cierta ambigüedad respecto al uso del cannabis como un tratamiento de cabecera para mejorar la calidad de vida en pacientes con dolor crónico.

Estudios realizados en Estados Unidos

En Estados Unidos se realizó una investigación empleando el cannabinoide cannabigerol CBG. Los pacientes que formaron parte de la muestra a los que se le administró reportaron que el dolor disminuyó progresiva y rápidamente después de las primeras tomas. Además, otros padecimientos como la ansiedad, la depresión y el insomnio también presentaron una disminución en su sintomatología.

La investigación, que fue realizada por científicos de la Universidad Estatal de Washington, utilizó una muestra de 127 pacientes. De ellos, el 75% reportó que “mejoró muchísimo” respecto al dolor por su padecimiento después de haber consumido cannabis como tratamiento del dolor. Una vez que terminaron el tratamiento con cannabis, ninguno de los pacientes reportó alguna señal del síndrome de abstinencia.

¿En qué tipo de dolores se puede utilizar ?

Durante varias décadas, el cannabis se ha considerado ilegal, lo que ha impedido la realización de investigaciones modernas. Sin embargo, en los últimos años, se ha producido un cambio y las investigaciones sobre las propiedades del cannabis para la salud son cada vez más frecuentes. 

La información científica actual sugiere que el uso de cannabis medicinal es beneficioso para personas que padecen dolor crónico, particularmente aquellos con dolor neuropático y oncológico. Hay numerosos estudios clínicos que lo respaldan. 

El aceite de cannabis es una forma concentrada de los cannabinoides contenidos en la planta. De acuerdo con los efectos que se busca aprovechar, se puede recomendar un tipo de aceite con alto contenido de THC, CBD o algún otro cannabinoide. 

Entre las propiedades del aceite de cannabis medicinal, se pueden encontrar diferencias entre el de alto contenido en THC o CBD y su efectividad para reducir diferentes tipos de dolor, pero en general puede ser de utilidad para: 

  • Relajar los músculos
  • Inducir el sueño
  • Combatir la artritis reumatoide
  • Reducir el estrés y la ansiedad
  • Combatir la fibromialgia 
  • Reducir las náuseas y el vómito
  • Como antioxidante, antiinflamatorio, antiespasmódico y antiepiléptico. 
  • Combate los dolores de cabeza o las migrañas. 
  • Auxiliar en el tratamiento de enfermedades neurodegenerativas.
  • Tratamiento de síndromes como el Parkinson y el Alzheimer 
  • Inhibe el crecimiento de tumores y células cancerígenas.

¿Cuál es la legalidad del aceite de cannabis?

La legalidad de la adquisición del aceite de cannabis varía significativamente según el lugar de residencia. Por ejemplo, el aceite de cannabis con alto contenido de THC es ilegal en la mayoría de países en todo el mundo. En aquellos lugares donde el cannabis recreativo es legal, como Canadá o algunos estados de América del Norte, se puede obtener el aceite o extracto con una receta médica o, en algunos casos, sin ella. 

Por otro lado, si estás buscando un aceite de cannabis medicinal con CBD, hay más países donde se puede adquirir. Este producto, conocido como aceite CBD, está disponible en numerosas tiendas en línea. Además, en muchos países que han legalizado el cannabis medicinal, se puede acceder a él. Por ejemplo, en el Reino Unido, la legalización se ha impulsado en casos de epilepsia grave. 

También en Europa, el aceite CBD no se vende como suplemento alimenticio, sino que se cataloga como producto cosmético. Aún no se conocen las leyes específicas sobre el aceite CBD dentro de la Unión Europea, pero se espera que en los próximos meses se establezcan regulaciones. 

Mientras tanto, en la Unión Europea, el aceite de CBD solo se puede comercializar como producto cosmético. En Latinoamérica, países como Colombia o México permiten la adquisición de aceite de CBD, pero en otros países de la región aún no se permite legalmente. 

¿Cómo hacer aceite de cannabis que sirve para los dolores?

  1. Reúne los ingredientes
  2. Coloca la marihuana a hervir y cuela
  3. Retira toda el agua de la planta lavada
  4. Añade aceite de oliva extra virgen
  5. Empieza el proceso en baño maría
  6. Enfría, cuela y embotella
  7. Conserva en un lugar oscuro y fresco

Reúne los ingredientes

Para preparar aceite de cannabis solo necesitarás de los cogollos de marihuana secos y aceite de oliva extra virgen de la más alta calidad que puedas encontrar.

Además, requerirás de dos ollas, una más grande que otra, recipientes de vidrio, un frasco de vidrio esterilizado para almacenar, un embudo, papel de cocina, una coladera y filtros para café.

Coloca la marihuana a hervir y cuela

En una olla, coloca la marihuana y agrega el agua hasta que cubra los cogollos por completo. Empieza a calentar el agua y, cuando hierva, baja por completo el fuego y permite que hierva a fuego lento durante diez minutos.

Una vez que haya pasado ese tiempo, retira del fuego y cuela la mezcla con la coladera. No presiones la hierba para que escurra el agua, sino que debes dejar que lo haga por su cuenta. Si lo consideras necesario, hierve de nuevo la marihuana y vuelve a colar hasta que el agua salga lo más limpia posible.

Retira toda el agua de la planta lavada

Ya que la marihuana se ha colado, es momento de que retires toda el agua que pudo haber absorbido, pues necesitamos que no se pierdan los cannabinoides que el agua podría llevarse. Para eso, extiende el papel de cocina y coloca la hierba encima de este.

No necesitas presionar ni pasar trapos o servilletas absorbentes por encima. Deja que el papel haga su trabajo y reposa unas horas, hasta que la marihuana esté por completo seca.

Añade aceite de oliva extra virgen

Ya que la marihuana no tenga agua y esté limpia de cualquier resto vegetal o químico que pudiera tener, coloca la planta en una olla pequeña y añade el aceite de oliva. La cantidad dependerá de qué tan concentrado quieres que esté el aceite de cannabis, pero recomendamos que el aceite cubra toda la hierba.

Empieza el proceso en baño maría

En el baño maría, lo que lograremos es que los cannabinoides se adhieran al aceite y así puedan liberar sus efectos medicinales. Para hacerlo, coloca agua en la olla más grande. Después, coloca la olla más pequeña dentro de la más grande, sin que la primera toque el fondo de la segunda. Seguido de eso, esperaremos a que el agua hierva.

El tiempo en que el agua esté hirviendo es largo y a fuego lento. Debe ser, por lo menos, de tres horas, removiendo la mezcla de vez en cuando para que se incorporen más los cannabinoides al aceite. Si tienes a la mano un termómetro de cocina, procura mantener la mezcla a 100°C.

Enfría, cuela y embotella

Una vez que haya pasado el tiempo en baño maría, retira la olla pequeña y deja que enfríe en el mismo recipiente. Solo cuando esté frío por completo, puedes empezar a colarlo hacia otro recipiente de vidrio. Utiliza el filtro de café y no permitas que ningún resto de materia vegetal caiga al aceite de cannabis. Ya que lo hayas colado, estará listo.

Conserva en un lugar oscuro y fresco

Así como cuando cultivas las plantas de cannabis, la luz que caiga sobre tu preparación puede ser benéfica o todo lo contrario. Lo mejor es que, una vez que la hayas depositado en el frasco de vidrio esterilizado, la coloques en el lugar más fresco y oscuro de tu casa.

¿Cuál es la dosis de aceite de cannabis que se debe tomar para aliviar los dolores?

Si el aceite de cannabis sirve para los dolores es porque depende de la dosis que se tome. Exagerar podría traer efectos secundarios indeseados y tomar muy poco podría no ayudar en nada. Es por eso que es importante reconocer el tipo de dolor que padeces para que, adecúes la dosis en función de él.

No se recomienda consumir más de 40 o 50 mg del aceite de cannabis, ya que esta cantidad es para las personas que padecen un dolor severo. Las dosis medias, en caso de un dolor leve, rondan los 25 mg al día, para dolores soportables, como el de la fibromialgia, cólicos, inflamaciones o golpes.

Lo ideal también es que no empieces por consumir la dosis completa. Primero debes cerciorarte que no tengas alguna reacción alérgica a la marihuana o al concentrado. Empieza a tomar una dosis baja de 2.5 mg al día durante dos o tres días. Si no notas una reacción adversa, entonces podrás subir la cantidad de aceite de cannabis de 5 en 5 mg, hasta que obtengas los efectos deseados.

La marihuana se ha convertido en uno de los elementos de medicina natural más empleados, investigados y en el que mejores resultados se han observado. Una vez que lo utilices, notarás que el aceite de cannabis sirve para los dolores y te deja una mejor calidad de vida. 

¿Buscas otras formas de usar el cannabis de manera medicinal? En el sitio de La Marihuana tenemos toda la información que requieres para hacer uso de esta maravillosa planta. ¡Recuerda consultar la Guía de Marihuana Medicinal y compartir tus experiencias!

Fuente: La Marihuana