El cannabis medicinal, legal en Puerto Rico, continúa su irrefrenable carrera de expansión y beneficia a los usuarios recreativos, al punto que la propia policía de la isla que es un estado agregado a Estados Unidos ha decidido ablandarse en la persecución a todo aquel que tuviera en su poder, para consumo propio, una onza (28,35 gramos) o menos de cannabis y/o cualquiera de sus derivados o parafernalia.
“Los gobiernos municipales tienen cada vez menos recursos. Hay situaciones mucho más graves que la posesión de un cigarrillo de marihuana. Por eso, la Policía Municipal tiene que dedicarse a asuntos más serios y no a cosas irrelevantes”, explicó el presidente de la Legislatura de San Juan de Puerto Rico, Marco Antonio Rigau.
Pero, claro, la expansión genera demanda y como el número de pacientes que usan cannabis medicinal para manejar sus dolores y afecciones sigue en aumento, a la par, se produce la apertura de nuevos establecimientos de cannabis que además traen nuevas ofertas de empleo a miles de puertorriqueños.
“La industria se está moviendo a paso acelerado. A poco menos de dos semanas de haber comenzado el 2019 ya tenemos nuestros próximos cursos del mes de enero casi vendidos. Los ciudadanos se están educando y mientras más se educan más seguros se sienten de los beneficios de la planta y eso genera mayor interés en las certificaciones”, explicó el presidente de Puerto Rico Legal Marihuana –PRLM-, Goodwin Aldarondo.
Apertura de 250 establecimientos relacionados con el cannabis
El hombre explicó que se estima que en los próximos seis meses comenzarán a operar 250 nuevos establecimientos. Esto ha provocado un aumento en la demanda por las certificaciones o cursos que requiere el Departamento de Salud a toda persona que interesa trabajar en la Industria de Cannabis Medicinal.
Según adelantó, los cursos comenzarán este 26 y 27 de enero y se extenderán por los próximos cuatro meses alrededor de la isla. Los mismos abarcarán temas relacionados al aspecto médico, legal, científico e histórico a nivel mundial del cannabis medicinal. También se les capacitará acerca de los métodos de cultivo, la preservación del producto, su empaque y el equipo necesario, así como la trayectoria económica del cannabis y los retos que enfrenta la industria por la temperatura, el costo de vida y la población de Puerto Rico.
Los talleres de capacitación, que garantiza otra expansión -tal vez la más importante-, la de las conciencias, se estarán ofreciendo en San Juan, Mayagüez, Ponce, Arecibo y Fajardo y tienen una duración de entre tres y seis horas, dependiendo del curso. El Reglamento 9038 establece que los cursos de licencia ocupacional y técnico de dispensario tienen como requisito una duración de seis horas y los cursos de las buenas prácticas agrícolas y de manufactura dos horas.
3000 empleos directos y 5.000 indirectos
Las autoridades boricuas estiman que la apertura de los nuevos establecimientos, que comenzarán a operar en los próximos meses, generarán 3.000 empleos directos y 5.000 indirectos. Cada taller será dictado por expertos y profesionales en el campo de la medicina, leyes y regulaciones y el derecho.
“Estamos más que satisfechos con el avance que la industria mostró el pasado año. Las tendencias y las expectativas para este 2019 están enmarcadas en la salud de los pacientes y el desarrollo económico de Puerto Rico, por eso estoy seguro que el cannabis seguirá ganando terreno”, concluyó Goodwin Aldarondo.
Por Rama
Fuente: La Marihuana