Mucho se habla de Mike Tyson, tal vez uno de los boxeadores más agresivos de la historia, y su eterna relación con los narcóticos.

Las penurias del nacido en Brooklyn, y que también es conocido como Malik Abdul Aziz, ya son bien conocidas en todo el mundo.

Incluso, sus conflictos con los narcóticos, las mujeres y las malas compañías ya son material redundante en libros y publicaciones.

Pero lo que todos se preguntan siempre y, casi nadie puede responder, es ¿cómo hizo el doble campeón mundial de los pesos pesados para combinar casi sin problemas una vida de excesos con una deportiva.

Curiosas estrategias

La primera pregunta que todos nos hacemos al conocer las peripecias de Tyson es que ocurría a la hora de los análisis, antes y después de las peleas.

La respuesta es simple: un pene de plástico y la orina de su esposa. Ese es el secreto de Tyson para evitar un dopaje positivo.

Uno de los boxeadores más violentos y controversiales de la historia reveló en una entrevista cuáles eran sus estrategias para evitar los positivos por drogas.

El ex boxeador nacido en Brooklyn, Mike Tyson, reveló cuál era su estrategia para evitar que le dieran positivo los controles antidóping ya que buena parte de su carrera se vio atravesado por el consumo de drogas.

El campeón pesado más joven de la historia, contó en diálogo con ESPN, que durante años utilizó la orina de su esposa y sus hijos en los controles antidopaje.

Ya en “Undisputed Truth”, su autobiografía Tyson había confesado que casi todas las veces que subió al ring estaba completamente drogado.

Riesgo de embarazo

“Yo solía usar la orina de mi esposa y entonces ella me decía: ‘cuando salgan los resultados te van a decir: ‘señor Tyson, está embarazado’, entonces mejor comencé a usar la orina de mis hijos”, dijo.

El dos veces campeón del mundo explicó cómo distraía a los médicos, al momento de los análisis de orina: “Es que tienes el ‘whizzinator’, el pene falso. 

“La mayoría de los hombres, aunque seas gay se sienten incómodos cuando les muestras el pene, así que cuando les mostraba el pene ellos se volteaban”, dijo.

“Yo me lo sacaba con la mano y me decían que lo hiciera yo solo”.

El engaño se producía cuando los médicos se daban vuelta para no ver las partes íntimas del rudo campeón que hoy tiene 52 años. 

En el año 2000, tras una pelea con Andrew Golota, los miembros de su equipo no llegaron a tiempo para cubrirlo y la prueba le dio positivo por marihuana, planta que ahora se dedica a cultivar.

Tyson asegura que el cannabis le permitió dejar de tomar calmantes: “Solía usar esas pastillas, todo eso para el dolor y casi me vuelvo loco. Era como un zombie, dejé de usarlas y usaba cocaína. Después dejé todo y empecé a fumar marihuana y me limpié”. 

“Así fue como empecé a vivir una mejor vida. Ya no uso calmantes y no sufro con el dolor”, contó el ex campeón que hasta hace poco tiempo, embargado por las deudas, animaba fiestas para poder subsistir.

Fuente: La Marihuana