Actualizado 14/11/2018 11:09:34 CET

ALMERÍA, 14 Nov. (EUROPA PRESS) –

La Policía Nacional de Almería ha detenido a dos hombres, que ya han ingresado en prisión, y a una mujer acusados de un delito contra la salud pública tras intervenir en una vivienda semiderruida que había sido ocupada en el barrio de Los Molinos un total de 355 plantas de marihuana, que eran cultivadas en el sótano.

La operación, que se ha desarrollado con dos registros más en el mismo barrio y en Cortijo Grande, ha permitido la incautación de 200 gramos de cogollos de cannabis sativa, lámparas, transformadores, extractores de aire, una envasadora al vacío y 3.555 euros en efectivo, así como una pistola ‘Star’ de calibre 9 milímetros parabellum con tres cartuchos sin percutir, que figuraba como sustraída de una vivienda desde el año 2016.

Según ha explicado la Comisaría en una nota, las investigaciones se iniciaron a principios del pasado mes de julio, cuando los agentes tuvieron conocimiento de una posible plantación de marihuana en la calle San Antonio de Almería, en una vivienda de dos plantas y patio medio derruida y no habitable.

La casa contaba con sofisticados sistemas eléctricos y de regadío, teniendo unas instalaciones perfectamente estructuradas para el crecimiento de la plantación enganchadas ilegalmente a la red eléctrica. El inmueble había sido ocupado ilegalmente desde hacía meses y en la actualidad pertenece a una constructora.

ESTRUCTURA «EMPRESARIAL»

Los principales investigados, un matrimonio, contaban con un socio, los cuales mantenían una estructura «empresarial» con reparto de funciones. Así, mientras el «socio» vigilaba, cuidaba y vivía en casa ocupada de la plantación, la mujer del líder de la trama, regentaba un negocio a escasos 250 metros dónde radicaba la plantación.

En ese negocio, según las pesquisas policiales, se suministraba todo lo relativo al cultivo de marihuana como semillas, turba o productos. Aprovechando esta «tapadera», vendían en cogollos y por gramos la droga ya seca. Mientras tanto, el líder de la trama, era el encargado de supervisar tanto el cultivo, producción y venta.

Una vez recopilada toda la información, el pasado día 9 de noviembre se llevo a cabo un despliegue de seguridad en el que se intervino el material y el estupefaciente. Tras la actuación, y dado que además la vivienda poseía una acometida ilegal de luz, operarios de la compañía eléctrica procedieron al desenganche ilegal y al restablecimiento normal del suministro en el barrio.

En el registro llevado a cabo en el establecimiento de venta de útiles para el cultivo de marihuana, los agentes de la Policía Nacional intervinieron entre otros objetos, una balanza de precisión y una envasadora al vacío.

Los tres detenidos pasaron a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de Almería, acusados de los presuntos delitos contra la salud pública, tenencia ilícita de armas, defraudación de fluido eléctrico y usurpación de inmuebles, de forma que los dos hombres ingresaron en prisión.

Fuente: Europa Press